¿Tu valla metálica tiene una pequeña abolladura? 🛠️
No siempre es necesario cambiarla. Con unos sencillos pasos, puedes reparar el daño y alargar la vida útil de tu cerramiento, manteniendo su apariencia y resistencia.
👁️ 1. Revisa el daño
Antes de actuar, inspecciona la zona afectada. Si la abolladura es superficial y no ha dañado la estructura, puedes repararla tú mismo. En caso de que haya rotura o deformación grave, lo ideal es reemplazar solo la sección afectada.
🔨 2. Usa un mazo de goma
Coloca un soporte de madera detrás de la zona dañada y golpea suavemente con un mazo de goma desde el lado contrario. Este método permite recuperar la forma original del metal sin dañarlo.
🔥 3. Prueba con calor
Si la abolladura es leve, aplica aire caliente con una pistola de calor a unos centímetros de distancia. El calor ayuda a que el metal recupere su posición natural.
⚠️ Evita el contacto directo o excesivo para no dañar el recubrimiento galvanizado.
🎨 4. Retoques de pintura
Una vez nivelada la superficie, aplica pintura anticorrosiva del mismo color. Esto evitará la oxidación y mejorará la estética del cerramiento. En CercadosOnline, puedes encontrar pinturas y acabados que combinan perfectamente con nuestros modelos de vallas.
🧰 Consejo extra: mantenimiento preventivo
Revisa tu valla una vez al año.
Evita apoyos o impactos repetidos.
Mantén la superficie limpia y libre de humedad.
Un mantenimiento básico prolonga la durabilidad y mantiene la seguridad de tu instalación.
Pequeñas abolladuras no significan grandes reparaciones. Con las herramientas adecuadas y productos de calidad, puedes mantener tu valla metálica como nueva por muchos años.
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